De este modo, Manos Limpias acusa a Pablo Iglesias de los delitos de pertenencia a organización criminal, contra los derechos de los trabajadores, desobediencia, contra la hacienda pública, asociación ilÃcita, apropiación indebida, societario de administración desleal, de influencias, cohecho y corrupción entre particulares.
Los hechos recogidos en la querella, que el Tribunal Supremo decidirá si admite a trámite para estudiar si procede abrir un proceso o directamente archivar la denuncia por falta de indicios, apuntan a diversas irregularidades, la mayorÃa supuestamente cometidas en la gestión y cobro de dinero no declarado o en pagos en dinero negro a trabajadores a través de la productora Izquierda.
Además, concreta que «Iglesias ha realizado viajes a Venezuela con el único fin de recibir fondos no declarados» del gobierno de ese paÃs «para mantener la actividad propagandÃstica revolucionaria», dinero que habrÃa entrado en España.
El secretario general de la organización de abogados, Miguel Bernal, aseguró a las puertas del Supremo que no reciben «ninguna subvención de ninguna institución o grupo» y que no están apoyados por ningún partido o grupo de presión.
«Detrás de Manos Limpias no hay ningún partido polÃtico ni grupo de presión, nos financiamos mediante las cuotas de nuestros socios y las aportaciones altruistas de un grupo de despachos de abogados», añadió Bernal.
Fundado hace un año, el partido Podemos ha experimentado un sorprendente ascenso y la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), publicada hoy, refleja que ha desplazado al partido socialista (PSOE) como la mayor fuerza de la oposición, con un 23 % de intención de voto, frente al 22,2%.
El Partido Popular (PP, centro derecha) se mantiene a la cabeza con un 27,3 por ciento de la intención de voto, según el sondeo del CIS.
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