La Unidad de Asuntos Internos de la Policía de Miami Beach anunció que el ahora ex sargento de ese cuerpo de seguridad, Mike Muley, fue finalmente despedido tras confirmarse que se encontraba en estado de ebriedad mientras trabajaba, usando su uniforme, como seguridad de un club nocturno de South Beach.
Muley estaba siendo investigado desde julio de 2014, cuando tras una llamada al 911 dado su estado de ebriedad, fue trasportado por un equipo paramédico al Monte Sinai Medical Center. El ex funcionario prestaba servicios como guardia de seguridad en Mango Tropical Café, ubicado en Ocean Drive.
Tras el incidente, el jefe de policía de Miami Beach Daniel Oates suspendido Muley con goce de sueldo y abrió una investigación sobre el incidente. «Simplemente no podemos tolerar una conducta inapropiada por nuestro oficial», dijo en aquel entonces. Mientras la defensa del ex agente insistía en que su malestar fue provocado por una obstrucción intestinal y no por el consumo de alcohol.
Sin embargo, la investigación de asuntos internos concluyo con el despido de Muley y un comunicado de Oates en el que se afirma que el ex funcionario avergonzó con su conducta tanto “al departamento de policía y todos sus compañeros, así como toda la ciudad de Miami Beach.»
