Donald Trump afirmó este miércoles que le «preocupa mucho» la injerencia que podría realizar Rusia con respecto a las elecciones legislativas estadounidenses que se celebrarán en noviembre, en una postura más firme de respaldo a las conclusiones de la Inteligencia norteamericana, luego de haber sido criticado por poner en duda los intentos del Kremlin.
«Me preocupa mucho que Rusia luchará muy duro por tener un impacto en las próximas elecciones«, escribió en su cuenta de Twitter.
El republicano también consideró que la injerencia rusa tendría el objetivo de apoyar al opositor Partido Demócrata, al reiterar su argumento de que «ningún presidente ha sido más duro con Rusia» que él mismo.
«Ellos estarán luchando fuerte para los demócratas. Definitivamente no quieren a Trump!«, agregó en su tuit. En Helsinki, Putin se rehusó a opinar sobre las elecciones legislativas de este año, aunque admitió a la prensa que quería que el ahora presidente supere a Hillary Clinton en los comicios del 2016.
Trump se ha mostrado más severo en los últimos días con respecto a su accionar durante la cumbre con Putin, en la que sostuvieron una reunión de dos horas en privado, solo acompañados por sus traductores. En un principio, enfrentó fuertes críticas después de la conferencia de prensa, durante la cual pareció apoyar la negación «extremadamente fuerte y poderosa» de Putin de que Moscú haya interferido en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016, por encima de las conclusiones de las agencias de inteligencia estadounidenses.
Un día después, Trump se vio obligado a buscar retractarse y cambió una de las frases que expresó. Tras haber dicho no ver «ninguna razón» para afirmar que Rusia había tenido injerencia en las elecciones, Trump sostuvo: «La oración debería haber sido: ‘No veo ninguna razón por la que no sea Rusia’. Una especie de doble negación».