La Guardia Costera de Curazao interceptó una lancha donde viajaban 37 venezolanos dispuestos a ingresar sin documentos a la isla, según informaron autoridades del país.
La embarcación fue remolcada y los venezolanos detenidos. Los menores de edad que figuraban dentro del grupo fueron llevados a la estación de Parera, con la finalidad de que estuviesen bajo la supervisión de las autoridades migratorias.
Esta embarcación fue un caso más de los cientos de venezolanos que intentan emigrar sin los documentos correspondientes ante las trabas y la burocracia que suponen los entes públicos del país.
La crisis económica ha empujado a aproximadamente 4 millones de venezolanos a huir de sus tierras en los últimos años. Los destinos más frecuentes son los países fronterizos, a los que es posible llegar con poco presupuesto.
En el caso de Curazao, Amnistía Internacional denunció recientemente que su Gobierno viola los derechos humanos de los venezolanos al deportarlos sin siquiera procesar solicitudes de refugio o asilo. Además de esto, la ONG también determinó que quienes están en condición irregular en la isla son vulnerables a explotación laboral, abusos, malos tratos y explotación sexual.
