La cuenta oficial del ente que, entre otras cosas, se ocupa de velar por la seguridad de los usuarios de transporte aéreo en Estados Unidos, está repleta de imágenes con los objetos más insólitos que se puedan imaginar.
Aquí, los diez más bizarros que los agentes de la TSA encontraron en el equipaje de mano de algunos pasajeros.
Un hombre intentó abordar un vuelo en Phoenix cargando un bolso que contenía 40 kilos de marihuana.
Otro quiso ingresar con una pistola cargada, en el Aeropuerto de Atlanta. Le aplicaron una multa de 11.000 dólares.
Las armas son algunos de los objetos prohibidos más frecuentes. Lo que no es común es encontrar a alguien que lleve un mortero de 60 milímetros.
En el Aeropuerto Dulles, de Washington, tuvieron que informarle a un pasajero que está prohibido ingresar a un avión con una granada de humo.
Lo mismo le pasó al que llevaba consigo una docena de afilados cuchillos, en Richmond, Virginia.
Tampoco están permitidas las armas medievales, como ésta, incautada en Chicago.
Algunos pasajeros son un poco más pícaros, y esconden el armamento que pretenden llevar de viaje. De todos modos, también son descubiertos. Como este que desensambló una pistola calibre 42 y ocultó los componentes en tres peluches.
Otros son más básicos, como el que puso una granada en el bolsillo de un pingüino de juguete.
O el que ocultó un cuchillo detrás de una tarjeta de Scooby-Doo.
Los animales vivos también están prohibidos a bordo del avión. A un pasajero le descubrieron, en Miami,escondidas dentro del pantalón, siete pequeñas serpientes y tres tortugas.
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