El capitán de la albiceleste, sólo mostró su genio en las semifinales de la Copa América y el resto del torneo fue intermitente, errático y estuvo muy lejos de su mejor versión, la del triplete con los catalanes y la espectacular media de un gol por partido que logró durante toda la temporada con su club.

De esta forma, la “Pulga” cae en su tercera final consecutiva con la albiceleste. Es necesario recordar, que el astro se quedó con la miel en los labios en la final de la Copa América de Venezuela 2007 contra Brasil y en el pasado Mundial cuando Alemania terminó levantando la copa.

Así que el 10 de Argentina alargó su racha de sinsabores con la selección y se fue del Estadio Nacional de Santiago con cara de incredulidad y con una deuda con la selección absoluta que hace perder la paciencia a sus aficionados gauchos.

Divorciado del gol… y del juego

No se puede dudar del talento de Messi. Después de todo es considerado el mejor jugador del mundo y con argumentos suficientes, sin embargo, esa condición no se ha demostrado durante la Copa América.

El delantero argentino se le ha visto con muchas inconsistencias, e incluso, llegaron momento de juego donde no tenía una participación influyente, o al menos no como en el Barcelona.

En una temporada donde Messi marcó 58 goles en 57 partidos y ganó los tres torneos más importantes, la Liga, la Copa del Rey y la ‘Champions’ con los catalanes, solamente consiguió una anotación con Argentina en su debut contra Paraguay por la vía del penal.

El caso es que todavía tiene una tarea pendiente. “El 10” sólo se colgó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, pero sigue sin un título de nivel en competencia de mayores.