El presidente Donald Trump buscó el miércoles restarle gravedad al riesgo que el coronavirus representa para Estados Unidos, pero designó al vicepresidente Mike Pence para que encabece la respuesta del gobierno federal.
Durante una conferencia de prensa ofrecida en la Casa Blanca junto a las principales autoridades sanitarias estadounidenses, la subdirectora del Centro para el Control y Prevención de enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) Anne Schuchat dijo a periodistas que espera un incremento en los casos de pacientes con coronavirus.
“La trayectoria de lo que estamos viendo en las semanas y meses venideros es muy incierta”, señaló.
Pero acto seguido Trump aseveró que ese no es el único escenario. Las autoridades sanitarias “ dijeron que podía empeorar y yo también he dicho que podía empeorar, pero no creo que sea inevitable. Nada es inevitable”, dijo Trump.¿Los tapabocas convencionales pueden llegar a proteger a las personas del coronavirus?
El mandatario aseveró que Estados Unidos está “muy preparado” para responder al virus, incluso si ocurre una gran propagación.Trump aprovechó la conferencia de prensa para anunciar que Pence liderará la respuesta para hacerle frente a la expansión del coronavirus en EEUU, pero rechazó equipararlo a la designación de un zar como lo hiciera su predecesor Barack Obama en 2014 para coordinar la respuesta del gobierno estadounidense al virus del ébola.
Trump justificó la designación de Pence al frente de la respuesta gubernamental debido a su experiencia como gobernador de Indiana ante la epidemia del síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS por sus siglas en inglés). La designación de Pence ocurrió después casi dos años después de que la administración Trump desmantelara la oficina para la seguridad sanitaria global como parte de una reorganización del Consejo de Seguridad Nacional.
Trump aseguró que de los 15 contagiados detectados en Estados Unidos, 8 ya han regresado a recuperarse a sus casa, 5 están completamente recuperados mientras que uno continúa hospitalizado. Además, están los 42 estadounidenses contagiados que fueron regresados desde Japón, donde estaban en un crucero y que ahora están en cuarentena.
El mandatario se mostró dispuesto a aceptar una partida de $ 8,500 millones solicitada por el jefe de la bancada demócrata en el Senado, el neoyorquino Chuck Schumer, quien criticó al gobierno de Trump después de que solicitara $ 2,500 millones, un monto que los demócratas criticaron por insuficiente.
La presidenta del Congreso, la demócrata Nancy Pelosi, criticó a Trump acusándolo de haber respondido al coronavirus de manera tardía e inadecuada.
Trump respondió el miércoles calificando a Pelosi de “incompetente” y de crear pánico irresponsablemente en lugar de trabajar de manera bipartidista. El jefe de estado también le restó importancia al coronavirus al recordar que cada año fallecen entre 25,000 y 69,000 estadounidenses a consecuencia de la influenza. “Quedé sorprendido”, admitió Trump.
Trump se dio crédito por haber permitido solamente el ingreso de estadounidenses entre todos los viajeros procedentes de China con destino a Estados Unidos y dejó abierta la posibilidad de imponer restricciones similares a Italia y otros países con alto número de pacientes aunque señaló que ese momento todavía no ha llegado.
Más de 81,000 pacientes han sido contabilizados desde que el virus nuevo fue identificado en China.
Anthony Fauci, director de enfermedades infecciosas en el Instituto Nacional de Salud, expresó su expectativa de contar con una vacuna para el virus en 2021.
